NORUEGA. - Los niños con vidas más activas tienen menores probabilidades de presentar síntomas de depresión al crecer, afirman investigadores de la Universidad Noruega de Ciencia y Tecnología. Tonje Zahl, Silje Steinsbekk y Lars Wichstrøm analizaron a 795 niños de 6 años de edad, 699 de 8 años y 702 de 10 años en Trondheim, Noruega. Determinaron que los niños que practican deportes o actividades físicas de intensidad moderada a vigoroso eran menos propensos a mostrar síntomas de depresión dos años más tarde.
Para el estudio, los especialistas colocaron un dispositivo portátil en los pequeños, el cual monitoreó sus niveles de actividad física diaria. Luego dieron seguimiento a los niños y sus padres cada dos años mediante entrevistas para determinar si desarrollaban síntomas depresivos. Aunque hubo una mayor incidencia de síntomas entre los niños de menor actividad física, el estudio no determinó si existe un vínculo concreto entre el sedentarismo y la depresión clínica.
Los resultados fueron recopilados en el estudio denominado "Actividad física, comportamiento sedentario y síntomas de depresión mayor en la niñez intermedia", compartido por la Academia de Pediatría de Estados Unidos en su sitio oficial.
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