Presidente, Two Oceans In Health
Decano Asociado de Investigación, Facultad de Ciencias de la Salud, Universidad O&M
Resumen
La fuerza laboral en salud constituye uno de los pilares fundamentales para el funcionamiento eficiente y equitativo de los sistemas sanitarios. Este artículo analiza su papel como determinante esencial de los sistemas de salud, evaluando el riesgo atribuible que representa su insuficiencia o distribución inequitativa en la generación de brechas sanitarias. Además, se examina su vínculo con la estrategia de Atención Primaria en Salud, destacando cómo las deficiencias en la gestión del talento humano limitan el alcance de la cobertura universal.
- Introducción
Los sistemas de salud están condicionados por determinantes estructurales que afectan su funcionamiento. Entre ellos, la fuerza laboral destaca por su papel vertebrador: sin personal capacitado y suficiente, los demás componentes no pueden operar adecuadamente.1 Este determinante adquiere mayor relevancia frente a la necesidad de reducir desigualdades en salud y garantizar servicios centrados en las personas, especialmente a través de la Atención Primaria en Salud (APS).
- Determinantes de los Sistemas de Salud y el Rol de la Fuerza Laboral
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), los determinantes de los sistemas incluyen gobernanza, financiamiento, tecnología, información y fuerza laboral. 2 La fuerza laboral en salud comprende no solo médicos y enfermeras, sino también trabajadores comunitarios, técnicos, personal administrativo y de apoyo. Su presencia equitativa, capacitación adecuada y motivación impactan directamente en el acceso, calidad y eficiencia del sistema.3 La OMS proyecta un déficit global de 10 millones de trabajadores sanitarios para 2030, afectando desproporcionadamente a países de ingresos bajos y medios.4
- Riesgo Atribuible de la Fuerza Laboral en la Reproducción de Inequidades
El concepto de riesgo atribuible permite cuantificar el impacto de un factor en la carga de enfermedad. En este caso, la falta de personal, su concentración en áreas urbanas o la migración hacia países de más altos ingresos, genera disparidades territoriales en salud.5 En América Latina, por ejemplo, estudios han mostrado que una menor densidad de médicos y enfermeras en zonas rurales se asocia con mayores tasas de mortalidad infantil, menor cobertura de inmunización y menor control de enfermedades crónicas, catalogándose un riesgo atribuible de la fuerza laboral en la equidad, cobertura universal y APS de moderado, bajo y alto, respectivamente.6
- APS y su Dependencia de la Fuerza Laboral
La APS, como modelo de cuidado centrado en la comunidad, requiere de equipos multidisciplinarios con competencias clínicas, comunicacionales y comunitarias. Sin una fuerza laboral estable y motivada, se debilita la capacidad resolutiva del primer nivel de atención.7
Los países que han logrado fortalecer la APS, como Cuba, Costa Rica o Canadá, lo han hecho sobre la base de un recurso humano bien distribuido, con formación orientada a lo comunitario, y políticas de retención en zonas vulnerables.8 Por otra parte, los dos países que conforman la isla Hispaniola, República Dominicana y Haití, se encuentra en una posición intermedia a baja en comparación con países como Cuba, Costa Rica y Canadá en términos de disponibilidad de médicos, cobertura de APS y retención rural, lo que sugiere desafíos persistentes en el fortalecimiento del talento humano en salud y en la consolidación de un sistema más equitativo (Gráfica 1). 8
Gráfica 1. Fuerza Laboral en APS de países seleccionados
- Hacia una Política de Fortalecimiento del Capital Humano en Salud
Una política de recursos humanos, gestión de talento humano en salud, debe considerar cinco pilares9:
1) Planificación con enfoque territorial
2) Formación continua
3) Incentivos para entornos desfavorecidos
4) Condiciones laborales dignas
5) Gestión participativa
Además, se requiere articular estas políticas con las estrategias de cobertura universal y APS, asegurando que cada comunidad cuente con personal competente, motivado y culturalmente sensible.10
- Análisis Crítico Regional
En América Latina, la fuerza laboral en salud enfrenta grandes desafíos: a) escasez de personal en áreas rurales; b) migración de profesionales capacitados y c) sistemas fragmentados. Pese a avances en algunos países como Brasil y Cuba, persisten desigualdades estructurales que afectan la cobertura efectiva.11
En Europa, la mayoría de los países cuenta con personal suficiente, aunque el envejecimiento de la fuerza laboral y las brechas entre Europa occidental y oriental son crecientes. En regiones como Escandinavia, se han logrado buenos niveles de retención en APS con modelos de formación integral y salarios competitivos. 12
Asia presenta un panorama desigual: Japón y Corea del Sur tienen estructuras avanzadas y planes estratégicos sólidos, mientras que países del sudeste asiático enfrentan deficiencias en acceso y distribución del recurso humano.13
En Estados Unidos, a pesar del gran volumen de trabajadores sanitarios, existe una marcada inequidad en la atención según nivel socioeconómico y etnicidad. La escasez de profesionales en APS, combinada con un sistema orientado al cuidado terciario, limita su capacidad resolutiva en la base del sistema (Cuadro 1).14
Cuadro 1. Análisis Crítico Regional de la Fuerza Laboral en Salud
Región o país | Característica |
América Latina | Escasez de profesionales a nivel rural, migración profesional, sistemas fragmentados |
Europa | Envejecimiento del personal, desigualdades Este-Oeste |
Asia | Desigualdad Regional, acceso limitado en el sudeste asiático |
EEUU | Desigualdad socioeconómica, escasez en APS, sistema centrado en terciario |
Fuente: Referencia número 14
- Conclusión
La fuerza laboral en salud es un determinante esencial que impacta la equidad, eficiencia y sostenibilidad de los sistemas de salud. Su adecuado fortalecimiento, mediante políticas integrales y centradas en la estrategia APS, es clave para cerrar brechas y avanzar hacia sistemas más justos y resilientes.
La inclusión de líderes comunitarios resulta esencial como componente importante de la fuerza laboral en salud, sobre todo en la toma de decisiones que puedan hacer potencialmente sostenibles las acciones a nivel comunitario. De manera particular, la integración de personal de salud “no médico”, como las enfermeras, en el seguimiento de embarazadas, pacientes y personas en estado de vulnerabilidad, representa un componente prioritario en el desarrollo del talento humano para reducir desigualdades en salud.
Los desafíos son comunes, pero las respuestas deben adaptarse a las realidades de cada región. En consecuencia, una planificación estratégica y la mejora de condiciones laborales en APS, según el contexto histórico y cultural de cada nación, comunidad o conglomerado poblacional, son esenciales para fortalecer los sistemas de salud.
8. Referencias Bibliográficas
1. Frenk J, et al. Lancet. 2010;376(9756):1923-58.
2. WHO. Framework for action. Geneva; 2007.
3. Campbell J, et al. WHO; 2013.
4. WHO. Workforce 2030. Geneva; 2016.
5. Dieleman JL, et al. Lancet. 2016;387:2521-35.
6. PAHO. Acceso universal. OPS; 2014.
7. Starfield B, et al. Milbank Q. 2005;83(3):457-502.
8. Kruk ME, et al. Lancet Glob Health. 2017;5(5):e480-1.
9. Dussault G, et al. Human Resources for Health. 2006;4:12.
10. WHO. PHC Universal Health Coverage. Geneva; 2019.
11. PAHO. Recursos humanos en salud: retos para América Latina. OPS; 2022.
12. WHO Europe. Health workforce policies in the European Region. WHO; 2020.
13. Tangcharoensathien V, et al. Health workforce in Asia: challenges and opportunities. BMJ. 2018;361:k2482.
14. Bodenheimer T, Pham HH. Primary care: current problems and proposed solutions. Health Affairs (Millwood). 2010;29(5):799–805.
[1]* El autor es médico especialista en Salud Pública, con MBA en Gestión Internacional de la Salud por Frankfurt School of Finance and Management, Maestría en Ciencias de la Salud Pública y el PhD en Estudios Interdisciplinarios, mención Salud Global, por la Universidad de Miami.
No te pierdas una noticia, suscribete gratis para recibir DiarioSalud en tu correo, siguenos en Facebook, Instagram, Twitter, Linkedln, telegram y Youtube